
Implementar hoy una Estrategia de Sostenibilidad no es una recomendación, sino más bien, una necesidad. Tomar acciones y definir objetivos en conciencia en las dimensiones económicas, sociales y ambientales es fundamental para las empresas en la actualidad.
Al respecto, Maximiliano Fontecilla, gerente general de Proyecta Impacto, asegura que «una empresa es exitosa cuando logra crear valor a sus accionistas, al mismo tiempo en que crea valor para la sociedad y el medioambiente. Una Estrategia de Sostenibilidad permite a las empresas definir objetivos claros respecto a su desempeño social y ambiental, desarrollando un plan de acción que efectivamente logre crear valor en aquellos temas que son relevantes para sus clientes, comunidades, proveedores, inversionistas, entre otros públicos de interés».
El co-fundador de Proyecta Impacto agrega que «la definición de una estrategia permite comunicar los compromisos de la empresa, sus objetivos y los indicadores con los que medirá su desempeño y el plan de acción que espera realizar para alcanzar sus metas. De esta manera, involucra a los colaboradores y otros públicos de interés, facilitando la colaboración y consolidando la gestión de sus impactos».
Entre las razones de por qué apostar por tener una estrategia, desde la consultora de sostenibilidad aseguran que tiene múltiples beneficios, tales como:
- Formalizar iniciativas que permitan consolidar, equilibrar y unificar esfuerzos. Lo que no se mide no se puede gestionar.
- Aumenta la capacidad de generar valor a través del progreso y desempeño de manera interna y externa.
- Definir un camino de trabajo incluyendo a los distintos públicos de interés.
- Permite anticiparse a riesgos sociales, y ambientales y así, garantizar la sostenibilidad financiera de la empresa.
Pero construir una Estrategia de Sostenibilidad no es un trabajo fácil, por eso también tiene un lado B. ¿Qué sería lo malo y lo feo de ella? Aquí te explicamos:
- Es un trabajo a plazo donde los resultados no son inmediatos. La organización asume compromisos y es clave que se cumplan.
- Se cambian paradigmas, protocolos, procesos y por ende, la cultura organizacional donde puede existir resistencia al cambio.
- Se debe involucrar activamente al equipo y puede que deban asumir nuevas responsabilidades.
- La estrategia se debe revisar periódicamente y actualizarse a los contextos que exijan los tiempos contemporáneos.
El cambio climático y la actividad humana en la Tierra son cada día más drásticos y por eso, es necesario tomar medidas que permitan aportar a un entorno lo más saludable posible. Toda empresa y organización debe conocer los límites ambientales, su impacto y repercusiones para responsabilizarse.
En Proyecta Impacto, expertos en sostenibilidad, ayudan a construir estrategias acorde a los objetivos de cada empresa.
¿Cómo lograrlo?
Maximiliano concluye que «definir una estrategia requiere alinear los intereses de los públicos internos y externos a la organización, por lo que para construirla, primero es necesario realizar un levantamiento de información conocido como Análisis de Materialidad. En forma paralela, es necesario conocer todas las iniciativas que está desarrollando actualmente la empresa que generan impactos sociales y ambientales, y finalmente, con esta información es necesario determinar compromisos de la empresa, diseñando un plan de acción que permita alcanzar los desafíos de sostenibilidad».
Si quieres construir una estrategia de sostenibilidad, escribe a contacto@proyectaimpacto.com