Skip to main content
Empresa B

Las empresas B marcan un nuevo camino a seguir, en el que se considera qué rol juegan en la sociedad y cómo pueden aportar algo más que beneficios.

El éxito de una empresa ya no se mide únicamente por lo que obtiene en ganancias, sino por lo que se propone a futuro como rol en la sociedad. Es en lo que se transforma y busca transformar. Es la nueva era donde las empresas quieren  contribuir en el mundo y redefinir el sentido del éxito empresarial.

Hoy en día no se trata solo de operar para ser la mejor empresa del mundo, sino la mejor para el mundo. Un cambio de paradigma que busca dejar su huella en el planeta y la sociedad siendo un agente de cambio y aportando en la solución de problemáticas sociales y ambientales actuales.

Ser una organización con certificación de empresa B ya no es solo una convicción, sino más bien el camino hacia donde apunta el mercado porque distingue a quienes tienen esta certificación de sus competidores, siendo identificada por su responsabilidad en el Triple Impacto.

Aquello también es positivo cuando se trata de acercarse a los consumidores. Datos del Barómetro de Consumidores Conscientes 2020-2021 de Toluna, compañía que se especializa en investigación online y de conocimiento del consumidor, indica que el 46% de los consumidores interactúa con marcas que comparten sus valores, mientras que el 49% ha dejado de comprar aquellas que no están alienadas con los suyos.

Cada vez son más las empresas que están reconsiderando de forma significativa su rol en la sociedad, un fenómeno acrecentado por la pandemia y la amenaza evidente de los efectos del cambio climático.

El movimiento B Corp busca que su labor impacte positivamente en toda la sociedad, con acciones que vayan de la mano de los ciudadanos y de un estilo de vida más responsable para generar ese cambio real y significativo. Ser B es ser sostenible, consciente del impacto de uno mismo, interdependiente y colaborativo, pero también, es utilizar la fuerza de la propia empresa para cambiar el mundo, teniendo en cuenta la sociedad y al planeta en cada decisión que se toma.

Así entonces, ser una empresa B es buscar ser impulsores de nuevos estándares, políticas e iniciativas empresariales que quieren provocar un cambio sistémico en la forma de entender el crecimiento y el paso de las empresas por un mundo al que deben aportar algo más que beneficios económicos.

Además, certificar e incrementar el compromiso social y ambiental de una organización, permite reducir costos, mejorar la rentabilidad y genera más valor para los clientes, trabajadores, proveedores y distintos públicos de interés del negocio.

2 A más personas les gusta
Danielle Vernier

Periodista y escritora especializada en empresas, sostenibilidad, medioambiente, política y sociedad.